lunes, 28 de noviembre de 2016

A tu ritmo

Tengo una idea
envuelta en un silencio blanco,
una gota roja acusadora
que brota de mi mano
y el sabor a hierro
de todos los cuerpos vencidos,
en los labios.
Tal vez no lo imaginé;
he amado.
La mentira ha sido una espina
arrancada de cuajo.
Y hoy soy la respuesta
de todo el que una vez creyó en algo: 
si la verdad no existió fue
porque no supiste verla.
Ahora me cuestiono 
cada segundo
si debo seguir el tempo de este daño. 
  

martes, 15 de noviembre de 2016

Ella es breve

No quieres destapar este desastre.
Hablamos de un barco a la deriva,
que sigue anclado a la orilla que abandona.
Un amante precoz
que acaricia las cadenas de sus errores.
Una trapecista que pierde el equilibrio
y todavía te busca más allá de su red.
Una voz enamorada del silencio.
Un poeta que sólo sabe escribir a su primer amor.
Hablamos de un caos
que adora la brevedad de las cosas eternas
y se ordena omitiendo que ama.
Por las noches no grita
no tiene ganas,
sólo escucha y presta atención a su calma.
Hoy ve a la vida alimentando una soledad divina,
y esa luna que brilla más que nunca
porque, como ella, sólo será esta vez.

jueves, 10 de noviembre de 2016

Para cicatrizar contigo dentro

Estamos ahí aunque aún no nos conocemos.
Ya tenemos un rincón, 

un refugio y un sofá donde recluirnos en libertad.
Somos animales capaces de destruirnos 

pero vamos a escoger otra manera.
No ha pasado aún, 

y sin embargo, 

ya sé que si algún día te convirtieras 

en una brecha en mi piel por culpa de algún error, 

arrancaría uno a uno cada punto 

y volvería a dejarte entrar;
para cicatrizar contigo dentro.
Y si dolieses en el corazón tanto como en la carne,
haría lo mismo con la ropa;
para cicatrizar contigo dentro.
Porque el dolor no me va a importar, 

el frío ni lo notaré, 

la conciencia ya la he perdido, 

los avisos no los oiré, 

las cosas que entiendo dejarán de tener sentido 

y los domingos serán un puto placer.
Por todo lo que ya sé y por lo que no adivino 

ni me atrevo a imaginar,
ya te quiero conmigo.
Y quiero hacerme con tu historia 

y quiero escribir el final.

En el aire

Te tengo atrapado en las pestañas.
Eres el sueño de
una noche invernal sin pijama.
Abrí los ojos antes de que acabaras,
y te has quedado enredado en la mañana.
Amanece casi naranja.
El mundo es una maravilla 

pero la humanidad lo mata.
Amanece casi azul.
La vida enseña pero nadie aprende nada,
y el pasado se angustia y los libros tiemblan.
Amanece casi rojo.
Hay un botón en mi cuerpo
que cede sólo ante tu peso,
y pacta con todo este desorden,
para que el momento sea sólo eso:
infinitamente,
un punto muerto
durante un instante,
un parón efímero en el tiempo.
Amanece y no existe la muerte
ni la desolación
ni la destrucción
ni la ambición
ni el desengaño.
Soy inmune al miedo
y nada puede hacerme daño.
Dura sólo unos segundos
pero vuelo.
Y una vez que vuelo
el mundo es mío y
tu vuelo es mío y
nos salvamos.
Paramos,
descansamos,
resucitamos,
y volvemos a volar.
Con los píes en el aire
el suelo no nos puede hacer temblar.

viernes, 4 de noviembre de 2016

El miedo

Es pregunta y problema. 
Es una cuestión de tiempo y a veces de espacio.
Es voluble y temerario. 
Es inmortal pero no invencible. 
Es fuerte, pero si soplas, su pedestal se tambalea.
Cuando lo besas en los labios 
y te vas y lo abandonas, 
sientes un hormigueo en los dedos 
y el poder de los valientes.
Algunos incluso caminan cogiéndolo de la mano, 
o pasean por encima sin dedicarle un simple gesto.
En mi caso huyo.
Corro, me escondo y no hago ruido.
Pero siempre me encuentra.
El miedo,
que todavía me estaba esperando,
en aquel lugar,
todas las tardes naranjas. 
Aún recuerdo la única vez que lo perdí,
lo olvidé en tu pelo,
tu risa,
tu mano,
tus ojos,
tu cuerpo, 
y tu boca,
cuando me quisieron.